PSICOLOGIA DE LA TERCERA EDAD

 




Yo no creo en la edad.

Todos los viejos
llevan en los ojos un niño,
y los niños a veces nos observan
como ancianos profundos...

Oda a la edad

Amado Nervo


Las personas mayores se enfrentan a problemas específicos de su edad.

Por una parte la pérdida de seres queridos, la soledad, la sensación de inutilidad, los problemas físicos, son fuentes de depresión y ansiedad.

Igualmente la pérdida de capacidad cognitiva, la sensación de torpeza (física y mental), son una fuente de angustia en nuestros mayores.

La Psicogeriatría se ocupa por una parte de promover hábitos saludables, incentivar la socialización y orientar a las personas mayores para conseguir un mejor ajuste personal y psicosocial.

Por otra parte, se presta una gran atención al diagnóstico de pérdidas cognitivas (que pueden ser de origen neurológico o fruto de estados depresivos) y se enseña a la familia a conseguir una mayor adaptación de sus mayores


CONCEDE SU ESPACIO A TUS MAYORES


En la tercera edad tienen lugar procesos involutivos y diversas alteraciones, además de los aspectos psicológicos, que pueden estar relacionados con factores ambientales y personales. De esta manera, el envejecimiento psicológico conlleva cambios en los procesos sensoriales y perceptivos y en capacidades cognitivas como la inteligencia, el aprendizaje y la memoria. Sin embargo hay que tener en cuenta que los trastornos psicológicos en los ancianos son el resultado de diversos factores, además del envejecimiento patológico, por lo que no se les puede juzgar como efecto del envejecimiento.
El proceso de envejecimiento comporta una secuencia de cambios a nivel biológico, psicológico y social, siguiendo un proceso simultáneo de ganancia o de pérdida.
De hecho, la inteligencia emocional en la tercera edad está más desarrollada que en etapas anteriores de la vida.  Nuestros mayores son más empáticos y son capaces de ponerse en el lugar de los más jóvenes, entendiendo, tras el paso de la vida, que hay pocas cosas realmente importantes, y que "las pequeñas tragedias" diarias son en realidad, situaciones que si bien parecen tremendas en el momento, son simplemente circunstancias pasajeras que en muchas ocasiones no tienen la mayor importancia.
Nuestros mayores conectan bien con los niños y con los jóvenes, disfrutan viéndoles abrirse paso en la vida y descubriendo, a través de éxitos y fracasos su propia personalidad. Suelen escucharles y mostrar activamente su amor (en muchísimas ocasiones son más cariñosos con los nietos que con los hijos que cuando eran pequeños). 
Los ancianos, con la sabiduría de la vida, pierden ese falso amor propio que impide dejarse ayudar, lo agradecen. Buscan activamente el contacto con otras personas y cuando conectan con personas de su edad, disfrutan de la conversación, rememorando otros tiempos, compartiendo recuerdos del pasado. Saben escuchar, y son muy proactivos. 

Con todo ello, el envejecimiento representa especiales riesgos que tienen que ver con el declive de la salud física e importantes pérdidas personales: pérdida de seres queridos, de autonomía y de roles sociales. Desde esta perspectiva nos referimos a la presencia de trastornos depresivos en las personas de la tercera edad y a los cambios en sus valoraciones de eficacia personal. Igualmente es importante el valor que en esta etapa de la vida tiene para los ancianos una buena red de apoyo social, que ayudarían a prevenir o paliar la aparición de trastornos psicológicos como los trastornos del estado de ánimo.
Las personas de la tercera edad son plenamente conscientes de la presión a la que están sometidos sus hijos, y a veces se sienten "culpables por ser una carga". 
Debemos pararnos a pensar de la propia carga que fuimos nosotros, tal vez en tiempos más difíciles, cuando la crianza de los niños pasaba por un máster en economía doméstica. Nuestros mayores no se planteaban un disfrute personal como las generaciones posteriores, y sin embargo vivieron con alegría la crianza y los éxitos de sus hijos, y se muestran divertidos con esos pequeños nietos que parece que nacen ya con una ingeniería en aparatos electrónicos. 
Darles un lugar en nuestra vida, hacerles partícipes de la familia es uno de los mejores regalos que puedes hacer a quienes siempre estuvieron ahí, animándote, apoyándote, educándote. Tal vez nunca hubieras llegado al lugar que ocupas sin sus consejos o sus desvelos. 
Hazles partícipes en el cuidado de los nietos, no como el último recurso, sino como el más preciado de todos ellos.
Y cuando no puedan, cuando se sientan cansados o enfermos, comprende la situación, proporcionales calidad de vida, no les dejes largo tiempo solos con sus pensamientos. La vejez, la auténtica vejez llega con la soledad.
Anímales a que hagan actividades sociales (el mus, pintar, los bolos del parque),  pídeles pequeños favores que sean asumibles para ellos, haz que los nietos les respeten y jueguen con ellos, inclúyeles en los planes de fin de semana.
La depresión no es una de las enfermedades primordiales en la tercera edad, son los trastornos adaptativos que conlleva: la progresiva pérdida de seres queridos, problemas de movilidad, pérdida de memoria. Todos los obstáculos se pueden minimizar si pensamos que la vejez es un estado caracterizado por esas pérdidas físicas y en algunos casos de procesos como la memoria a corto plazo.
Te invito a que hagas una reflexión: si a tus 40/50 años, te pidieran que tuvieras las destrezas, la energía, la motivación, que tenías a los 14 años y si no te excluirían socialmente ¿lo considerarías justo? 

Hay un tiempo para todo (Eclesiastés 3:1-8 NVI)

Todo tiene su momento oportuno; hay un tiempo para todo lo que se hace bajo el cielo:
un tiempo para nacer,
    y un tiempo para morir;
un tiempo para plantar,
    y un tiempo para cosechar;
 un tiempo para matar,
    y un tiempo para sanar;
un tiempo para destruir,
    y un tiempo para construir;
 un tiempo para llorar,
    y un tiempo para reír;
un tiempo para estar de luto,
    y un tiempo para saltar de gusto;
 un tiempo para esparcir piedras,
    y un tiempo para recogerlas;
un tiempo para abrazarse,
    y un tiempo para despedirse;
 un tiempo para intentar,
    y un tiempo para desistir;
un tiempo para guardar,
    y un tiempo para desechar;
 un tiempo para rasgar,
    y un tiempo para coser;
un tiempo para callar,
    y un tiempo para hablar;
 un tiempo para amar,
    y un tiempo para odiar;
un tiempo para la guerra,
    y un tiempo para la paz.

LAS MASCOTAS COMO TERAPEUTAS EN LA TERCERA EDAD



Entre las grandes necesidades de las personas mayores está el AFECTO.

En muchas ocasiones la persona mayor se encuentra sola durante todo el día, sin posibilidad de hablar con nadie, con el único consuelo de la televisión y el silencio como compañero triste y pesado.

Pero las personas mayores tienen unas necesidades afectivas inmensas: se sienten solas, y los días se hacen eternos. Muchas de las personas mayores a las que se les pregunta, tienen como toda actividad realizar las tareas domésticas y en algunos casos dar un paseo por el parque.


PSICOGERIATRÍA






No es cierto que las personas mayores estén más tristes o sean más infelices. Es un mito que debemos desterrar.

Lo que es verdad es que las personas de la tercera edad han vivido más experiencias, buenas y malas, que les hacen ver la vida desde una perspectiva más sosegada.

No obstante, aparte de situaciones de duelo, muy frecuentes en edades avanzadas, y que suelen ser especialmente duras cuando un padre sobrevive a un hijo, la soledad, la falta de expectativas personales, el abandono o el aislamiento puede sumir a personas mayores en un estado de abatimiento.

No hay que olvidar que la tercera edad es una etapa en la que la persona tiene mucho que ofrecer, pequeñas ayudas a los miembros más jóvenes de sus familias, disfrutar de su compañía, hablar con vecinas o amigas, realizar pequeñas actividades de ocio...


Cuando la persona mayor cae en un estado de tristeza y falta de esperanza, o por el contrario se muestra especialmente irritable, sería conveniente una evaluación psicológica para determinar su estado anímico y poder darle pequeñas orientaciones para reestructurar su tiempo, y en algunos casos, para realizar la evaluación psicológica pertinente para averiguar si puede estar iniciándose algún tipo de proceso degenerativo.

PROBLEMAS EN LA TERCERA EDAD


En la tercera edad tienen lugar procesos involutivos y diversas alteraciones, además de los aspectos psicológicos, que pueden estar relacionados con factores ambientales y personales. De esta manera, el envejecimiento psicológico conlleva cambios en los procesos sensoriales y perceptivos y en capacidades cognitivas como la inteligencia, el aprendizaje y la memoria. Sin embargo hay que tener en cuenta que los trastornos psicológicos en los ancianos son el resultado de diversos factores, además del envejecimiento patológico, por lo que no se les puede juzgar como efecto del envejecimiento.

El proceso de envejecimiento comporta una secuencia de cambios a nivel biológico, psicológico y social, siguiendo un proceso simultáneo de ganancia o de pérdida.

Con todo ello, el envejecimiento representa especiales riesgos que tienen que ver con el declive de la salud física e importantes pérdidas personales: pérdida de seres queridos, de autonomía y de roles sociales. Desde esta perspectiva nos referimos a la presencia de trastornos depresivos en las personas de la tercera edad y a los cambios en sus valoraciones de eficacia personal. Igualmente es importante el valor que en esta etapa de la vida tiene para los ancianos una buena red de apoyo social, que ayudarían a prevenir o paliar la aparición de trastornos psicológicos como los trastornos del estado de ánimo.

DEPRESIÓN EN LA TERCERA EDAD

La tercera edad suele describirse como una época de descanso, reflexión y de oportunidades para hacer cosas que quedaron postergadas mientras uno criaba a los hijos y desarrollaba su carrera.

Lamentablemente, el proceso de envejecimiento no es siempre tan idílico. Acontecimientos de la tercera edad como, por ejemplo, los trastornos médicos crónicos y debilitantes, la pérdida de amigos y seres queridos, y la incapacidad para participar en actividades que antes disfrutaba, pueden resultar una carga muy pesada para el bienestar emocional de una persona que está envejeciendo.

DEMENCIA SENIL

Definimos la demencia senil como un síndrome mental que se caracteriza por un deterioro de la memoria a corto y largo plazo, asociado a trastornos del pensamiento abstracto, juicio, funciones corticales superiores y modificaciones de la personalidad. 


Todas estas alteraciones son lo suficientemente graves como para interferir significativamente en las actividades de relación, laborales o sociales. 


Síntomas: Aparecen como rasgos asociados a la demencia: la ansiedad, síntomas obsesivos, aislamiento social, ideación paranoide o celotipia y vulnerabilidad incrementada al estrés.

La edad de comienzo de la demencia senil es después de los 65 años, aunque existe otra demencia de inicio presenil. 


El curso de esta enfermedad puede ser, progresivo, estático o reversible (hipotiroidismo, hematoma subdural, hidrocefalia normotensiva). 


Puede ser de inicio brusco y curso estable (enfermedad neurológica), de inicio insidioso y curso lentamente progresivo (enfermedad degenerativa) y de inicio y curso lentos (tumores, hematoma subdural, metabolopatias, etc.) 


El deterioro del estado general es variable:


- Leve, cuando conserva la capacidad de independencia, con un juicio relativamente intacto y una adecuada higiene personal,

- Moderado, cuando necesita algún grado de supervisión y 

- Grave, cuando necesita supervisión continua, con estado vegetativo. 


A lo largo de la evolución de la enfermedad aparecen una serie de complicaciones: auto y heteroagresividad, delirio, traumatismos, infecciones diversas, desorientación temporoespacial, etc. 

DEMENCIAS TIPO ALZHEIMER

De todas las Demencias Seniles destaca la demencia tipo Alzheimer como la más común. 

Especificidades

Tenemos que hacer un diagnóstico diferencial de la demencia senil, fundamentalmente con el envejecimiento normal, delirium, esquizofrenia, episodios de depresión mayor y otros trastornos con síntomas de deterioro cognoscitivo. 

Rasgos característicos de la enfermedad:

1. Pruebas evidentes de deterioro de la memoria a corto plazo (incapacidad para recordar el nombre de tres objetos al cabo de cinco minutos) y a largo plazo (incapacidad para recordar información que le era conocida en el pasado o conocidos por todos). 

2. Deterioro del pensamiento abstracto (dificultad para definir conceptos, semejanzas, significado de términos, etc.).

3. Deterioro de la capacidad de juicio (incapacidad de resolver problemas relacionados con la vida diaria, laboral, social, incapacidad de planificar, etc.)

4. Otros trastornos corticales superiores, como afasia, apraxia, agnosia y dificultades constructivas. 

5. Modificaciones en la personalidad (alteración o acentuación de rasgos premórbidos). 


6. Alteraciones de forma significativa en sus actividades laborales sociales y de relación. 


Clasificación de los síntomas: 


1.- Cognoscitivos o neurológicos: amnesia (95-100%), afasia expresiva y receptiva (60-80%), apraxia (75%), agnosia (35-70%), trastornos del aprendizaje, desorientación (75-90%), convulsiones, contracturas musculares, alteraciones de los reflejos, temblor, incoordinación motora. 

2.- Funcionales: dificultad para caminar, comer, asearse, vestirse, realizar las tareas del hogar y en general las de la vida diaria. 

3.- Conductuales: reacciones catastróficas, cuadros de furor, episodios maníaco-depresivos, violencia, apatía, vagabundeo, trastornos del sueño, lenguaje obsceno, alucinaciones, ideación delirante, robos, paranoia, trastornos del juicio, conductas paradójicas, trastornos sexuales, inadaptación social, trastornos de personalidad, acatisia. 

4.- Síntomas asociados: delirium, alteraciones sensoriales (auditivas, visuales, gustativas, olfativas), con otras patologias (cardiopatías, artritis, artrosis, diabetes, osteoporosis). 


Demencias primarias:

En este grupo están incluidas las enfermedades neurológicas degenerativas que producen demencia en sus manifestaciones clínicas. La demencia tipo Alzheimer, la demencia vascular y demencia debida a múltiples etiologías (vascular y Alzheimer). También otras entidades neurológicas degenerativas cursan con demencia (Parkinson, Pick, Corea de Huntington).


Demencias secundarias:

En este grupo están las enfermedades sistemáticas que cursan con demencia por alteraciones neurológicas (hipotiroidismo, deficiencia de folatos, etc.) y las neurológicas no degenerativas (hidrocefalia de tensión normal, meningitis crónica, tumores cerebrales, etc.)


COMPORTAMIENTO EN DIFERENTES FORMAS DE DETERIORO INTELECTUAL



DEMENCIA
DELIRIO
DEMENCIA REVERSIBLE
DAÑO CEREBRAL  FOCAL
VEJEZ NORMAL
1. SINTOMAS
A) Quejas sobre problemas de memoria
Detectado por otros. Paciente no consciente
El paciente a menudo niega tener problemas
Detectado por otros. Paciente no consciente
El paciente puede quejarse de problemas de memoria
El paciente puede quejarse de problemas de memoria
B) Tipos de problemas de memoria detectados
Interferencia importante con actividades de la vida diaria
Cambios selectivos y cambiantes. Principales actividades alteradas
Importantes interferencias con actividades cotidianas
Funciones espec. afectadas (pe espacial pero no HH verbales)
Leve incremento en el olvido (pe nombres)
C) Alucinaciones y delirios
Ideas paranoicas a veces presentes con problemas de memoria. Ilusiones en pocos casos
A veces vívidas alucinaciones e ilusiones elaboradas
No bien descrito
Ausente
Ausente
2. HISTORIAL
A) Síntomas
Alzheimer: insidioso. Multi-infarto a veces repentino
A veces, repentino
No bien descrito
Asociación repentina con traumatismo cerebral
Reacciones a cambios en la vida normal, sin  cambios específicos
B) Duración
Meses o años
Unos pocos días o semanas
No bien descrito
Fecha del incidente
C) Desarrollo
Alzheimer: insidioso. Multi-infarto: gradual, por etapas
Se vuelven más agudos en pocos días
No bien descrito
No progresivo
Cambios mínimos en grandes períodos de tiempo
D) Fluctuaciones
Alzheimer: insidioso. Multi-infarto: algunos cambios fluctuacionales, peores durante las noches
Pueden ser extremas, incluso de hora a hora
No bien descrito
Moderadas fluctuaciones situacionales

NEUROPLASTICIDAD Y ENFERMEDAD DE ALZHEIMER

El punto de partida con base científica, en el que se asienta la intervención terapéutica no farmacológica en el campo de las demencias, es la capacidad plástica del cerebro, conocida como neuroplasticidad.


La neuroplasticidad se define como “la respuesta que da el cerebro para adaptarse a las nuevas situaciones y restablecer el equilibrio alterado, después de una lesión” Así pues, el objetivo básico de los tratamientos de psicoestimulación es el de favorecer la neuroplasticidad mediante la presentación de estímulos, debidamente estudiados, que eliciten las capacidades intelectuales, emocionales, relacionales y físicas de forma integral.

ESTIMULACIÓN COGNITIVA EN ALZHEIMER

PROGRAMA DE ESTIMULACIÓN COGNITIVA EN LOS DISTINTOS NIVELES DE DETERIORO


La atención: con tareas simples que ayuden a reforzar la activación mental (ejemplo: series numéricas concretas, nombres de los meses del año en sentido directo e inverso).


La orientación temporal, espacial y de la persona: con tareas básicas de situación en el momento temporal y espacial, biografía personal y de su entorno más inmediato (amigos, familia…), para mantener al enfermo en contacto con la realidad que le rodea, objetivos básicos de la Terapia de Orientación a la Realidad.


La memoria: potenciando la memoria inmediata con ejercicios de repetición de series, reforzando la memoria reciente con ejercicios cortos que faciliten la fijación y el recuerdo (“me llamo como su hija”), manteniendo el mayor tiempo posible la memoria remota (mediante la repetición continuada de los ejercicios).


El concepto numérico y el cálculo: tareas de cálculo mental, resolución de problemas aritméticos, operaciones aritméticas y juegos numéricos.


El razonamiento: con ejercicios que trabajen la capacidad de clasificar características de los objetos.


El lenguaje escrito: con tareas de redacción de un texto, escritura de una frase o palabras, al dictado y/o copia.


El dibujo libre o guiado (copia), optimizando las praxias constructivas.Enfermos con deterioro moderadamente grave o demencia moderada: GDS 5


En esta fase, la estimulación cognitiva persigue los aspectos básicos de la cognición: la atención, la orientación temporal y espacial más simple –día de la semana– y en la persona, la memoria, sobre todo la memoria remota, sin abandonar los aspectos cognitivos más instrumentales como el lenguaje, la percepción visual y las capacidades práxicas.

En esta fase se utilizan estímulos más simples que en la fase precedente. La lectura continúa siendo una de las capacidades residuales del enfermo en las cuales se apoya la psicoestimulación para facilitar las tareas. Asimismo, la realización de ejercicios a diario, de una manera repetitiva y rutinaria, constituyen una ayuda a la permanencia de una memoria reciente muy reducida.

Focalizaremos nuestro trabajo en los siguientes puntos:

Orientación temporal, espacial y de la persona: realizada a diario ayudará al enfermo a mantener una orientación continuada, mediante la Terapia de Orientación a la Realidad (TOR).


Memoria remota: mediante tareas de evocación, utilizando ayudas de clave semántica o fonética.


Escritura: utilizando las capacidades residuales preservadas del paciente. El inicio de la desestructuración de la escritura en este estadio hace necesario un planteamiento de ejercicios simples y fáciles, dictado o copia de frases, palabras o letras, y su repetición diaria.


El reconocimiento numérico y el cálculo: mediante tareas más sencillas, de cálculo y de reconocimiento de números.


La percepción visual y el reconocimiento de objetos cotidianos, como mantenimiento de un nivel de conexión con aquello que le rodea.


Razonamiento a partir de ejercicios de clasificación de palabras utilizando diferentes campos semánticos (instrumentos, utensilios de cocina, muebles).


Enfermos con deterioro grave o demencia moderadamente grave: GDS 6 



La estimulación cognitiva en este estadio se halla mucho más limitada y debe adaptarse al modelo involutivo correspondiente a la pérdida de las operaciones concretas, utilizando ejercicios de simulación con objetos reales y básicos de la vida diaria.

Focalizaremos nuestro trabajo en los siguientes puntos:



La pre-escritura: en esta etapa, la escritura no es posible, recurriendo en la mayoría de los casos, a tareas de pre-escritura y coordinación visual-motora.


El reconocimiento visual mediante ejercicios en los cuales los objetos son reales, o son fotografías con un contenido emocional elevado para el enfermo por pertenecer a su propia biografía.


El reconocimiento de las características físicas de los objetos: por ejemplo, el color mediante tareas de coloreado de figuras geométricas sencillas (círculo, cuadrado, triángulo…) u objetos muy simples (p. ej., un árbol, una casa, un vaso); también se realizará la estimulación sobre las formas simples de los objetos.


El reconocimiento espacial básico: mediante tareas de dentro, fuera.


La manipulación de los objetos reales de uso habitual por el enfermo resulta esencial para mantener el mayor tiempo posible una mínima independencia en tareas cotidianas (usar el tenedor o cuchara, uso del peine…). En este tipo de tareas la imitación es una primera fase de facilitación.

GLOBAL DETERIORATION SCALE (GDS) PARA VALORACIÓN DETERIORO COGNITIVO

MANIFESTACIONES CLÍNICAS DE LA ENFERMEDAD DE ALZHEIMER

Si bien son variadas las entidades que cursan con demencia, es la enfermedad de Alzheimer la más prevalente y presenta una sintomatología, dentro de su heterogeneidad, más acorde a un proceso evolutivo.

Una de las escalas clinicoevolutivas más utilizadas es la Global Deterioration Scale (GDS) (Reisberg, 1982). 

Antes de plantear cualquier tarea de estimulación cognitiva, es preciso conocer con la máxima precisión posible, cuáles son las funciones cognitivas que se mantienen y el grado de conservación. Para ello, sin duda, es imprescindible una correcta evaluación neuropsicológica,la cual debería realizarse por un neuropsicólogo experto y acompañarse de la correspondiente orientación terapéutica que de ella se derive.


GDS 1

Sin deterioro cognitivo/Normalidad

• No hay quejas subjetivas de pérdida de memoria.
• No se objetivan déficit de memoria en la entrevista clínica


GDS 2

Deterioro cognitivo muy leve/Olvido benigno senil

• Hay quejas subjetivas de pérdida de memoria, más frecuentemente en las siguientes áreas:
a) Olvidos del lugar donde ha dejado objetos familiares.
b) Olvido de nombres familiares.
• No hay evidencia objetiva de déficit de memoria en la entrevista clínica.
• No hay déficit objetivo en el trabajo ni en situaciones sociales.
• Actitud apropiada respecto a su sintomatología.

GDS 3

Deterioro cognitivo leve/Compatible con enfermedad de Alzheimer incipiente 


• Primeros déficit claros. Manifestaciones en más de una de las siguientes áreas:


a) Se suele perder cuando viaja a lugares no conocidos.
b) Se evidencia su bajo rendimiento laboral.
c) Se hace evidente la pérdida de palabras y nombres.
d) Retiene relativamente poco material cuando lee un párrafo de un libro.e) Demuestra una disminución en el recuerdo de nombres de personas que acaba de conocer.
f) Pierde o extravía objetos de valor.
g) En la exploración clínica se puede evidenciar un déficit de concentración.



• Evidencia objetiva de déficit de memoria que se pone de manifiesto en una entrevista exhaustiva.

• Disminución del rendimiento en las áreas laboral y social.

• Empieza a negar los déficit.

• Estos síntomas van acompañados de ansiedad leve o moderada.

Nota: si sólo se demuestra alteración de memoria: alteración amnésica atribuida a la edad (AMAE). Si presenta otras funciones alteradas pero estables: deterioro cognitivo atribuido a la edad (DECAE). Si los déficit son progresivos: demencia inicial.


GDS 4

Deterioro cognitivo moderado/Demencia leve 


• Déficit evidentes al realizar una cuidadosa historia clínica. Los déficit son manifiestos en las siguientes áreas:


a) Disminución en el conocimiento de acontecimientos actuales y recientes.


b) Puede presentar algún déficit en el recuerdo de su historia personal.


c) Déficit en la concentración, que se hace evidente en la sustracción de series.


d) Disminución en la capacidad para viajar, manejar las finanzas, etc.


• No suele haber déficit en las siguientes áreas:
a) Orientación en tiempo y persona.
b) Reconocimiento de personas y caras familiares.
c) Capacidad para desplazarse a lugares conocidos.


• Incapacidad para realizar tareas complejas.


• La negación es el principal mecanismo de defensa.


• La respuesta afectiva se aplana y el individuo se retrae ante situaciones de mayor exigencia.

GDS 5

Deterioro cognitivo moderadamente grave/Demencia moderada 


• El paciente ya no puede pasar sin algún tipo de ayuda.


• El paciente es incapaz de recordar detalles relevantes de su vida actual, por ejemplo su dirección o número de teléfono que tiene desde hace años, los nombres de parientes cercanos (p. ej., sus nietos), de su escuela, colegio, instituto o universidad en que se graduó.


• A menudo presenta desorientación temporal (fecha, día de la semana, estación…) o de lugar.


• Una persona con educación formal puede tener dificultad al contar hacia atrás desde 40 de 4 en 4 o desde 20 de 2 en 2.


• Las personas en este estadio se acuerdan de muchos datos importantes referentes a ellos mismos y a los demás.


• Invariablemente saben su propio nombre y el de su esposa e hijos.


• No requiere ayuda para el aseo ni para comer, pero puede tener alguna dificultad en elegir qué ropa ponerse.

GDS 6

Deterioro cognitivo grave/Demencia moderadamente grave 



• Puede olvidarse ocasionalmente del nombre de su esposo/a, de quien depende del todo.


• No será consciente de acontecimientos y experiencias recientes.


• Retiene algún recuerdo de su vida pasada, pero es poco preciso.


• Generalmente, no es consciente de su entorno, ni en el tiempo ni en el espacio.


• Tiene dificultad en contar de 10 hacia atrás y, a veces hacia delante.


• Requerirá asistencia en las actividades de la vida diaria, por ejemplo puede ser incontinente, precisará ayuda para desplazarse, pero ocasionalmente mostrará capacidad para trasladarse a lugares conocidos.


• Frecuente alteración del ritmo diurno.


• Con frecuencia distingue a las personas conocidas de las desconocidas.


• Casi siempre recuerda su propio nombre.


• Aparecen cambios emocionales y de la personalidad. Éstos son bastante variables e incluyen:


a) Conductas delirantes, como por ejemplo, los pacientes acusan a su esposo/a de ser un impostor, hablan con figuras imaginarias de su entorno, o con su propio reflejo en el espejo.
b) Síntomas obsesivos, como por ejemplo, la persona continuamente repite sencillas actividades de limpieza.
c) Síntomas de ansiedad, agitación e incluso de conducta violenta que no existía hasta entonces.
d) Abulia cognitiva, como por ejemplo, pérdida de fuerza de voluntad por no poder mantener la intencionalidad el tiempo suficiente para determinar cómo convertirla en acción.

GDS 7 

Deterioro cognitivo muy severo/Demencia grave 


• En el curso de este estadio se perderán todas las habilidades verbales. Al principio de este estadio verbalizará palabras y frases muy concretas. Al final, no hay lenguaje sólo gruñidos.


• Incontinencia urinaria. Requiere asistencia para el aseo y la alimentación.
• A medida que avanza el estadio se pierden las habilidades motoras básicas, por ejemplo la capacidad para andar.


• El cerebro ya no parece capaz de decir al cuerpo lo que debe hacer. Aparecen a menudo signos y síntomas neurológicos generalizados y corticales.


Fuente: Reisberg B y cols. (1982). Modificada por Tárraga L. (1999).

EJERCICIOS DE ORIENTACIÓN ESPACIO-TEMPORAL- ALZHEIMER

ORIENTACIÓN

La orientación en ESPACIO, TIEMPO y PERSONA, entendida como el conocimiento que el sujeto tiene del entorno espacial y temporal en el cual se desenvuelve, se relaciona con capacidades cognitivas como la atención y vigilancia, la memoria reciente, el conocimiento autobiográfico y la proyección en el futuro.

ALTERACIONES EN LA ORIENTACIÓN ESPACIO-TEMPORAL Y DE LA PERSONA


En las demencias leves: desorientación temporal en la fecha, el mes, incluso día de la semana, conservando la orientación en el año.

Fases moderadas y más graves de las demencias, la desorientación temporal es completa.También se observa desorientación espacial en el lugar en el que se encuentran. Algunos aspectos de la desorientación en el tiempo y en el espacio inmediato, se encuentran relacionados con la pérdida de la memoria reciente (el día es una información en permanente cambio, al igual que el lugar donde se encuentran en un determinado momento); otros aspectos de la orientación temporal y espacial son más permanentes y más resistentes al deterioro en las fases leves de la demencia . Respecto a la persona, los aspectos que más se pierden en las fases leves son aquellos referentes a su edad, siendo el año de nacimiento, la fecha y el nombre de sus familiares más resistentes al deterioro en las primeras fases.

La terapia de orientación a la realidad (TOR), entendida como un conjunto de técnicas mediante las cuales una persona toma conciencia de su situación en el tiempo (orientación temporal) y en el espacio (orientación espacial), es una terapia imprescindible en un programa terapéutico de demencias.

ESTIMULACIÓN COGNITIVA DE LA ORIENTACIÓN ESPACIO-TEMPORAL Y DE LA PERSONA


OBJETIVOS ESPECÍFICOS

• Favorecer y activar la orientación espacial y temporal para mantenerla el mayor tiempo posible.
• Mantener la orientación de la persona.
• Activar la memoria personal o autobiográfica.

OBJETIVOS SECUNDARIOS

• Ejercitar el lenguaje automático.
• Optimizar los niveles de atención.
• Favorecer la incitación a hablar y la fluidez verbal.

RECURSOS Y ESTRATEGIAS

• Terapia de orientación a la realidad.
• Uso de calendarios y ayudas externas.
• Facilidades en las tareas de orientación mediante recursos verbales.
• Utilización de técnicas de observación y validación.
• Orientación temporal: aspectos más recientes como día, mes, año y estación y aspectos más inmediatos como horas del día, fecha del mes…
• Festividades importantes y fiestas populares, como facilitadoras de la orientación temporal.
• Cronología personal (datación de la biografía personal), para favorecer la orientación temporal.
• Orientación espacial (aspectos más inmediatos como lugar donde se encuentra y aspectos más
recientes como ciudad, provincia, país, etc.)


ORIENTACIÓN ESPACIO-TEMPORAL Y DE LA PERSONA

Orientación temporal: 


• ¿Qué día de la semana es hoy?

• ¿En qué fecha estamos?

• ¿En qué mes estamos?

• ¿En qué año?

• ¿En qué estación del año?

• ¿Qué hora es?

• ¿En qué momento del día estamos?

• ¿Si ahora vamos a comer, qué hora debe ser?

Dada una situación determinada (por ejemplo):

• Mañana será 25 de Diciembre.

• ¿Qué fiesta celebraremos?

• ¿Qué es típico de estas fiestas?

• ¿Con quién lo celebraremos?

• ¿Qué comeremos?


Orientación espacial: 


• ¿Dónde estamos?

• ¿Qué es este sitio?


RECOMENDACIONES 


• Adecuar el nivel de exigencia de los ejercicios al estadio de demencia y al tipo de capacidades


residuales conservadas del enfermo, simplificando las tareas a medida que avanza la enfermedad.

• Utilizar recursos facilitadores, por ejemplo, proporcionar ayudas de carácter gráfico al paciente,

como calendarios, mapas, relojes, etc., con el fin de optimizar la orientación mediante la creación

de rutinas que favorezcan sus niveles atencionales.

• Potenciar hábitos de utilización de ayudas de memoria, como agendas,planificación de programas de actividades diarias, calendarios, recordatorios, notas…

• Favorecer la orientación a la realidad (OR) potenciando el conocimiento de las festividades tradicionales (p. ej., celebración de las fiestas navideñas en relación con el mes del año, estación…).


• ¿En qué calle estamos?

• ¿En qué planta estamos?

• ¿En qué barrio estamos?

• ¿En qué ciudad estamos?

• ¿En qué provincia?

• ¿En qué nación?

Orientación de la persona:

• ¿Cómo se llama?

• ¿En qué año nació?

• ¿Qué edad tiene?

• ¿Está casado/a?

• ¿Cómo se llama su esposo/a?

• ¿Tiene hijos?

• ¿Cómo se llaman?

• ¿Y nietos?

• ¿Cómo se llaman?

• ¿Qué edades tienen?

• ¿En qué calle vive?

• ¿Cuál es su número de teléfono?